EL CARDENAL GIANFRANCO GHIRLANDA
- A Gianfranco Ghirlanda lo conocí de lejos. Por los años ‘80 yo era el Director del Departamento de Derecho Canónico de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Barcelona. Regularmente, acudía a mi querida Universidad Gregoriana. Allí hablaba con algunos antiguos profesores de Teología y del Instituto Bíblico. Allí compraba las publicaciones de la Universidad. Allí descubrí los apuntes del P. Ghirlanda. Los fui comprando regularmente. También sus libros. Los leía, enseguida, en la « Domus Internationalis Paulus VI » de Via della Scroffa, 70. Allí me alojaba por los años ‘80 y ‘90. Allí conocí y admiré a Mons. Jorge M. Bergoglio.
- Gianfranco Ghirlanda nació en Roma. Trabajó en Fiat mientras estudiaba en la Universidad Sapienza de Roma, en la cual yo soy doctor también en Letras, y obtuvo él también, allí, un doctorado en jurisprudencia en 1966. Ese mismo año entró en la Compañía de Jesús y completó sus estudios de Teología en la Pontificia Universidad Gregoriana, obteniendo la licenciatura, en 1973. Yo, entonces, completaba mis grados académicos « In utroqué jure » en la Pontificia Universidad Lateranense y el cuarto curso en la « Pontificia Accademia Ecclesiastica » (la escuela diplomática vaticana). Ghirlanda fue ordenado presbítero en 1973. Continö sus estudios en la Gregoriana y obtuvo una licenciatura en Derecho Canónico en 1975 y el doctorado « summa cum laude » en 1978. Yo ya estaba en el servicio diplomático vaticano.
- Ghirlanda impartió, luego, cursos de derecho canónico en varias facultades de la Gregoriana. En 1986, fue profesor titular decano de la Facultad de Derecho Canónico de 1995 a 2004. Yo, fui víctima de una enfermedad que terminó con una doble operación de un tumor cerebral. Y me convirtí en el profesor universitario que antes he dicho. También, durante màs de 25 años trabajé el la curia del Arzobispado de Barcelona.
- Ghirlanda fue consultor de la Congregación para el Clero; del Pontificio Consejo para la Interpretación de los Textos Legislativos; del Consejo Pontificio para los Laicos; de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos; de la Congregación para los Obispos; de la Congregación para la Doctrina de la Fe. Fue miembro del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida; prelado y abogado del Tribunal Supremo de la Signatura Apostólica; juez de la Corte de Apelaciones del Estado de la Ciudad del Vaticano de 1993 a 2003. Publicó diversos libros sobre Derecho Canónico y 126 artículos en diversas revistas y publicaciones conjuntas.Fue rector de la Pontificia Universidad Gregoriana (2004-2010). Preparó la redacción de constituciones apostólicas y comentó la « Anglicanorum coetibus » en 2009.
- Gianfranco Ghirlanda goza de gran reputación en la Roma eclesiástica. Al ser elegido Francisco Papa, uno de sus primeros mandatos fue iniciar el proceso de reforma de la curia. Dicho encargo recayó en Ghirlanda que lo culminó, el pasado mes de marzo, con la promulgación de la Constitución Apostólica «Predicate Evangelium».
- El 4 de julio de 2014, fue nombrado asistente papal de la Legión de Cristo en el intento para completar su proceso de renovación. Lo mismo, en 2020, para la asociación laica Memores Domini. En 2022, intervino en el Motu propio “Ad charisma tuendum” en el que se coloca la Prelatura personal del Opus Dei dependiendo del Dicasterio del Clero y se propone la reforma de sus estatutos.
- Gianfranco Ghirlanda fue creado cardenal por el papa Francisco en el Consistorio del 27 de agosto de 2022, asignándole la Diaconía del Santísimo Nombre de Jesús. Recibió la dispensa de la norma que manda que sólo los obispos pudieran ser cardenales.
- Gianfranco Ghirlanda representa, como canonista, un hombre que conoce muy bien las fuentes canónicas, pero también la historia de la Iglesia en sus vertientes cristológicas y eclesiales. Un fiel y seguro actualizador, no sólo ideólogicamente, sino también en la práctica y en la vida común, de la Iglesia del Concilio Ecuménico Vaticano II. És un ferviente seguidor de los Padres de la Iglesia en orden arealizar, en su plenitud, espiritual, pastoral y jurídica, aquel gran proyecto que anunció San Juan XXIII, el 24 de enero de 1959, en San Pablo Extra-Muros.
Mons. Jaume González-Agàpito