DAR A LOS MÃS NECESTADOS COMIDA CADA DÃA Y NO SÓLO EN NAVIDAD
- La sinodalidad de la Iglesia es la clave de la eclesiologÃa bizantina. Hoy, para los católicos, la gran propuesta del Papa Francisco. Ese Papa que, la semana passada, estuvo en Chipre y en Grecia con los ortodoxos y que, anteayer, en Lesbos, atendió y abrazó a los ‘malditos’ refugiados que no aceptan muchos estados europeos.
- La sinodalidad no quiere decir simplemente ‘solidaridad’ o “caminar juntosâ€. Significa la Iglesia sinodal que propone el Papa Francisco: la Iglesia del Nuevo Testamento, de los Padres de la Iglesia, espiritual y cristocéntrica, la Iglesia de la “Lumen Gentium†del Concilio Vaticano II. Iglesia ecuménica, servicial, evangelizadora y “en la calleâ€.
- Esta Iglesia no es sólo un medio comercial de propaganda y difusión de una filosofÃa, de una teologÃa, de una polÃtica o de una ideologÃa. És la gran asamblea, en el cielo y en la tierra, de los santificados por la sangre preciosa de Jesús el Crusto. De los que han recibido la “gracia increadaâ€de vivir la vida divina y que tienen la misión de invitar a ella, a todas las mujeres y a todos los hombres del mundo.
Los pobres y los necesitados són Cristo mismo, al que acogemos ‘sinodalmente’ en nuestra mesa. No sólo en Navidad, sinó cada dÃa. Ellos son, para nosotros, la presencia real, siempre, de Cristo en su Iglesia.
Jaume González-Agà pito