ESPACIO, TIEMPO, NATURALEZA, FÍSICA, ‘METAFÍSICA’ Y ‘LÓGOS’ ENCARNADO

1. En el Evangelio según Juan 1, 14, leemos: “Y el Verbo se hizo carne y habitó [ en su tienda ] con nosotros ( καὶ ὁ λόγος σὰρξ ἐγένετο καὶ ἐσκήνωσεν ἐν ἡμῖν)”.
   El ‘Logos’ de Dios irrumpe en el espacio y el tiempo. El ‘Lógos’ que “ἐν ἀρχῇ” (Jn 1, 1) el ‘Lógos’ era Dios ( καὶ θεὸς ἦν ὁ λόγος ).
2. Qué es en el mundo sensible, en el mundo de lo perceptible, que está unido a un espacio “absoluto” y a un tiempo “absoluto” pero este tiempo y este espacio no existen en sí, como decía Kant, sino sólo como “fenómenos”, es decir, en virtud de la organización de nuestra conciencia percipiente y sólo para todo aquello que en ella se puede dar intuitivamente.
3. Pero, en cambio, si consideramos, siempre con Kant, las cosas en st, es decir, independientemente de su manifestación sensible o tal como la inteligencia pura las conocerfa, ellas o et “mundus intelligibilis” no tienen relación alguna con el espacio y el tiempo, o, empleando el lenguaje de la crítica de la razón pura, tiempo y espacio tienen “realidad empírica” e “idealidad trascendental”.
   La ‘encarnación’ del ‘Lógos’ de Dios afirma, en cambio, que la quinta esencia del mundo inteligible, el ‘Lógos’ de Dios, entra real y sensiblemente en el mundo sensorial y experimental.
4. Se encuentran, pues, frente a frente: el mundo de los fenómenos en espacio y tiempo, la ciencia de la Naturaleza que se refiere a ellos y el ‘Lógos’ Divino sumamente transcendental. Los hechos de la experiencia, la construcción intuitiva a priori de las formas de espacio y tiempo, los conceptos fundamentales de la inteligencia, el mundo de las cosas en sí, considerado por la inteligencia pura como separado de su forma de manifestación, el mundo de lo inteligible, el conocimiento puramente racional de la Metafísica y la realidad ‘primordial’ y “en archè” de ‘Lógos’ de Dios.
5. Por consiguiente, una Metaffsica, más allá de la Física, o sea un mundo de realidades metafïsicas, en el que pudieran hallar su puesto el alma humana, los valores y el orden moral, es, insuficiente al lado, fuera y más allá del mundo de los fenómenos dominado por la causalidad mecánica de la Naturaleza, para explicitar la encarnación de ‘Lógos’ de Dios.
   Es el mundo real condicionado no sólo por la intuición fundamental del espacio y el tiempo, sino la misma entidad y realidad del ‘Todo’, los que quedan interrogados por la gran pregunta de la encarnación del Verbo Divino de Dios que convive con lis hombres.

Jaume González-Agàpito